sábado, 24 de diciembre de 2011

Capítulo 34 “Una hermosa lección de amor”


“Había olvidado lo que es suspirar
al pensar en alguien más...
había olvidado lo que es extrañar
a alguien que no sabes si regresará
había olvidado lo que es querer
sin siquiera saber quien es
había olvidado tantas cosas
tantas cosas, que había dejado de amar”.
              (Tovléz).





Mientras leía el poema que me enviaste nena, una especie de sonrisa meláncolica, dulce muy dulce, me invadió por completo. El recuerdo de una historia real vivida por alguien a quien adoro y que sigue muy cerca de mi vida. Hace no mucho tiempo para algunas de nosotras y para otras, las más jóvenes como si se tratara de un pasado arcaico, mujeres valientes, porque nunca hemos dejado de serlo, sufrían el desamor de una manera silenciosa. 


Dejó de suspirar y hasta casi de respirar por alguien que no la quiso jamás, dejó de sentir incluso dolor, por quien nunca debió de amar. Intentó a empujones olvidar hasta su nombre, que con el tiempo averiguó que no era ni tan siquiera con el que llegó a llamarlo, y por olvidar, se olvidó hasta de vivir. 

Se entregó en cuerpo y alma a un engaño, que más tarde fue un milagro divino, y que lleva por nombre Alba. 

Esa niña nacida de su vacio, hoy tiene 32 años, y desde el primer día que supo que la llevaba dentro, ha sido su aire, su verdad más inmensa, su energía, su fuerza, su luz, su victoria y su cura. 

Podría hablarte horas sobre ella, llenarte folios narrandote su pasado y la conquista de su incierto futuro, su lucha. Sin embargo para que me entiendas, para que conozcas mucho de ella, con muy pocas palabras, te diré, que a pesar de haber perdido muchas cosas, es ella en quien seguiré siempre viendo la más preciosa inocencia. 



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Feliz navidad  y prospero año nuevoo que la pasen super bienn se los desea  su amiga  hanvry ;)


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_ ¿Feliz? 


_ No sabes cuanto. Llevo demasiado tiempo sin salir a la calle, pareceré como una niña en día de fiesta. Creo que hasta tengo más apetito y me siento hasta caprichosa. 

El tono de su voz le decía todo, Bella estaba radiante, y él se sentía exultante por verla brillar. 

_ ¿Caprichosa?. Me gustaría saber que deseas. 

_ Oh Edward, no sé si estarás a la altura esta vez. 

_ Ponme a prueba. 

_ Jajajajaja, no te asustes, es muy sencillo al menos para mí, pero no se cuanto tiempo habrá pasado desde que lo hicieras por última vez. 

_ ¿Soy tan viejo para tí?. 

Vió su dificultad para abotonar su chaqueta y se acercó hasta ella para facilitarle el trabajo. 

_ Espera, ya lo hago yo . 

_ Ufff, ésto me desespera. 

_ Y a mí me desesperas tú. 

_ ¿Qué he hecho ahora? 

_ Me has cazado delante de todos. 

_ ¿Herido?, no te he cazado Edward, te has dejado cazar. 

La fue empujando con su cuerpo muy sosegadamente hasta retenerla entre la pared y su cuerpo, sin dejar apoyado completo su peso. Una mano en su cintura pequeña, la otra en su cuello, levantando con su pulgar su barbilla. Ahí estaban sus ojos brillando como espejos, chispeando como ascuas, encendiendolo. 

_ Ahora es cuando quiero que seas mi gata. 

Como una muñeca frágil, como un cachorro dócil mordió despacio su boca. Pequeños mordiscos sin ejercer presión, solo marcando sus labios y sobre éstos barridos de su lengua, probando el sabor más dulce. Amaba esos besos. Subió su mano derecha entre juguetona y densa, notando cada músculo de Edward en alerta, a través de su torso, buscando su cuello, hasta llevar sus dedos a su nuca y enrollarlos en su pelo. Pudo sentir cada poro de su piel retraerse, cada bello erizarse. Recorrió con su pulgar su garganta, notando su movimiento, tragando su saliva, y pudo escuchar el aire que entraba por su nariz hasta llenar e inflar sus pulmones. Desabrochó, no sin esfuerzo uno de los botones de su camisa, depositando un beso húmedo en su pecho, reconociendo su olor, venerando su aroma. Otro botón más y un beso cerca de su corazón, al que escuchaba fuerte y poderoso, magnífico y glorioso, cabalgando a galope . Una lamida vergonzosa en su pezón y ante la respuesta de Edward, otro intento de chupar su sabor. 

_ No te estoy cazando Edward, mírame, me estoy derritiendo. 

Se acercó hasta su oído y casi en un esfuerzo, pronunció algunas palabras con tal emoción contenida que Bella tembló por ellas. 

_ Esto es el cielo nena, y no quiero despertar de este sueño. No sabes como necesito que me toques, ser el dueño absoluto de tus deseos. Quiero que veas lo que haces en mí solo con respirar, con existir, con querer estar a mi lado. 

Bella volvió en un pequeño gesto su cara, buscando la boca que le hablaba, la que le hacía temblar como una hoja, buscandola como loca, para beber de ella una a una todas aquellas palabras. 

Desató a la bestia que sin media alguna abrió su boca, engullendo la de Bella, buscando su lengua, introduciendo la suya, haciendo que el baile fuera de amor. 

_ ¿Sabes el poder qué tienes sobre mí?. Todo princesa, todo. 

Sonrió algo angustiada al oír princesa, recordaba algunas frases que se repetían en su cabeza. 

_ ¿Por qué esa tristeza?. 

_ Dicen que las princesas son tan sensibles que notan la rotación de la tierra, por eso se marean tanto, que son tan vulnerables, que si están lejos de su reino se enferman, que hasta pueden morir de tristeza. No quiero ser débil Edward, quiero ser fuerte a tu lado. 

_ Nena, ¿de donde salen esas palabras? 

_ No lo sé. A veces vienen demasiado rápido, invaden por completo mi cabeza, pero no tengo imágenes, no puedo ligarlas, es … es... 

_ Shsss,shssss, un día cerrarás los ojos y cuando los abras yo estaré ahí contigo. No habrá más vacíos, ni pozos, ni temores.Y si eso te asusta, no habrá más princesas. 

Se acomodó entre sus brazos sintiendo como Edward abrochaba su camisa en silencio. 

_ Lo siento. 

Cada vez que la oía disculpase por algo, pedir perdón por lo que no entendía, solicitar permiso para hablar sentía tristeza. Era una manera de manifestar que aún no estaba de vuelta. 

_ Pues no lo sientas. 

Se separó de ella para hablarle, para que entendiera. 

_ Cada vez que eso sucede, aunque tú no lo entiendas estás más cerca. Lo que crees que está tardando demasiado en llegar, está apareciendo a borbotones en tu cabeza. Te esfuerzas demasiado, provocas los recuerdos, y sin querer al mismo tiempo los espantas. Dejalos llegar a su ritmo. Dejame cuidarte nena, dejame hacerlo a mi manera. Ahora dime ¿ qué prueba es esa qué tendré que superar para tí? 

_ Quiero que hagas una apuesta conmigo. 

_ Si tiene algo que ver con el ajedrez desisto. 

_ Jajajajaja, no no, quiero retarte a comer montañas de helado. 

_ ¿Helado? ¿eso es lo que quieres cenar? 

_ Sí, ¿tan raro es?. Llevo demasiados días alimentandome de comidas algo insípidas, tengo ganas de hacer alguna travesura. Dime que sí, por favor, por favor. 

_ Muy bien, tu mandas, pero te advierto, jajajaja, has perdido. 

_ Eso ya lo veremos. 

_ Y si gano ¿a qué tengo derecho? 

_ Bien eso será un secreto hasta el final. Si tu ganas yo cumpliré cualquier cosa que me pidas, y si por el contrario gano yo, preparate. 

Una chispa de picardía apareció en sus ojos, no se dejaría ganar, la vencería y su premio sería bastante recompensa. 

… 

_ Por fin. Te he dejado cuatro mensajes y no has contestado a ninguno. ¿Puedes decirme donde estabas? 

_Marlena tranquilizate, estaba ocupado simplemente. 

_ ¿Ocupado o entretenido? 

_ ¿Acaso te molestaría? 

_ Puede que sí, pero ahora eso no es importante. 

_ ¿Puedo saber que es tan urgente para dejar cuatro mensajes a un fiel servidor? 

_ No sé si sigues siendo fiel. 

_ Vamos Marlena,aún no te he fallado. ¿Que se te ofrece?, procura que sea divertido, es más interesante que hacer planes que parecen no tener los resultados que tú deseas. 

_ Eso no depende de mí. Tú eres quien está fallando al no encontrar a la persona indicada para llevarlos acabo. 

_ Como no, me había olvidado que tú nunca fallas. Acabemos querida, ¿qué es lo que se te ofrece? 

_ Pareces tener demasiada prisa y no me gusta compartir con nadie mi tiempo. 

_ Pues creo que tendrás que llamar en otro momento, o mejor será que quedemos para cenar y así podrás explicarte. 

_ ¿Me estas proponiendo una cita?. 

_ Jajajajajaja, no no era esa mi intención, tu no te dejas llevar por los momentos románticos preciosa, y yo ya estoy advertido. Cenaremos y me dirás que es lo que quieres sin interrumpirme en algo de exclusivo interés en estos momentos. 

_ ¿Puedo saber quien es? 

_ No puedo dar crédito. Marlena parece que te importara donde o con quién pudiera encontrarme. ¿Qué importa eso?, ¿celosa? 

_ Ni en tus mejores sueños. 

_ Así es Marlena, directa, fría, práctica y vengativa. Esa es la que conozco. 

_ ¿Algún piropo más?. 

_ Quizás más tarde en la cena. 

_ ¿A qué hora? 

_ Ya te llamaré en un rato. 

James colgó el teléfono y por una vez algo más feliz. Marlena estaba interesada en él de otra manera, o ¿quizás fuera solo su imaginación?. 



…. 

_ Hasta ahora voy ganando yo. 

_ Porque haces trampa, tú no hablas y yo no dejo de hacerlo, pero a partir de ahora, tendrás que ir más deprisa porque pienso ganar. 

Edward no hablaba, si todo salía como pensaba sería una noche muy muy larga, y no estaba dispuesto a darse por vencido. 

Le vió el rostro sonrojado y como una niña jugando con el helado en su boca. Era un sueño volver a verla disfrutar de aquella manera. No tenía que imaginarse su risa, la tenía, no era necesario soñar con su boca, la mordía, la chupaba, la lamia y la besaba cuando quería, no eso no era del todo cierto, quería más, quería mucho más, la quería toda, siempre. 

Y sus ojos, aquellos que desde el primer día habían iluminado su camino, ahora brillaban como nunca. 

_ ¿Qué miras? 

_ Come y calla. 

_ Eres un mandon. 

_ Vas a perder. 

_ No te enteras de nada cariño. 

Edward entrecerró los ojos, mirandola de una manera granuja. No podía ser verdad lo que estaba pensando. Bella era tan inteligente que … 

_ Ufff por fin te das cuenta, creí que no lo harías. 

_ No puede ser cierto lo que estoy pensando. 

_ Ajam , pues lo es. Estaba dispuesta a dejarme ganar. Jajajajaja, desde el primer momento. 

La risa de Edward se oyó por todo el establecimiento. Esa mujer, su mujer, su esposa. Cuando lo pensó, cuando fue capaz de repetir en su cabeza esas palabras se sorprendió a si mismo de no sorprenderse. Siempre había sido suyo, y Bella siempre le había pertenecido. No importaba bajo que contratos, o por sobre cualquier tipo de interés, había nacido un vínculo llamado a existir para siempre. 

_ ¿Estás segura? 

_ No me dirás ahora que tú también eres del club de caballeros que no cumplen sus promesas? 

No daba crédito. Bella repetía inconscientemente sus momentos, sin saberlo, sin darse cuenta. Bella había vuelto aunque ella no lo supiera, aunque fuera la última en darse cuenta. 

El alma contenía su alegría por miedo a asustarla, por miedo a decirle que estaba en casa, que solo había estado fuera pocos días, muy pocos, y que cuando menos lo esperase, al abrir los ojos, habría vuelto. 

_ Siempre cumplo mis promesas nena, siempre. Quitate tu anillo, y lee lo que hay escrito dentro. 

Bella deslizó su alianza entre sus dedos, y leyó “Ahora y siempre, todo”. 

_ ¿La tuya también dice lo mismo? 

Edward le entregó su alianza para que pudiera leer su inscripción. 

Y bella repitió aquellas palabras lentamente. 

_ En cualquier lugar. 

Tomó su mano, y con mucho cuidado volvió a colocarle el anillo sobre su dedo. 

_ Llevame a casa. 

Lo dijo mirandolo fijamente, confiandole el secreto que le nacía en el pecho. Edward no esperó la entendió desde el comienzo, sus ojos pedían a gritos que le hiciera el amor, que la estrechara entre sus brazos, que le besara la boca, que volaran juntos tan alto que no tuvieran regreso. 

No había tiempo, era tanto el deseo, que llegar hasta casa, subir la escalera corriendo y cerrar de una patada la puerta del dormitorio, pareció una prueba complicada. 

La tomó nervioso de la cintura y se estampó contra su boca sin misericordia. No podía soportar el deseo que le llamaba por todas partes. Su temperatura era tan cálida lo hacía arder solo con imaginarsela desnuda. 

_ Te daría la luz de mis ojos para que pudieras ver, recordar lo que no encuentras. Todo lo que hago nena lo hago por tí. 

Los suspiros de Bella iban en aumento caldeando su corazón, incendiandolo sin remedio. Abrió su chaqueta y arracó su preciosa camisa. No había tiempo para que lo que pensaba con ella, para lo que necesitaba amarla de nuevo. Y ella... ella no se resistía, no sentía miedo. No solo estaba entregada. De manera insinuante movía sus caderas, rozandose contra su polla, buscandola con su vientre, como una experta bailarina de la danza del vientre, que quisiera volverlo loco. 

Mordió su clavícula lamiendo sobre ella, prodigando un pequeño castigo para después otorgar el premio. Dolor y placer sucediendose simultaneamente para dar paso a deseos acumulados, nacidos en las entrañas y repartidos por todo el cuerpo. 

Tomó la mano de Bella y la llevó hasta su polla, que se alzaba orgullosa y valiente, en espera de sus caricias. 

_ Tocame nena, por dios tocame. 

Y Bella siguió a un ritmo demencial, lo que él induciendola había comenzado. Por encima de sus pantalones, tocando, acariciando, moviendo su pequeña mano hasta dejarlo al final del camino, al límite de su aguante. Sin dejar de besar su boca, de compartir su aliento, de consumir el aire, dos amantes desesperados por un final agónico. 

_ Voy a correrme nena, para no sigas, para. 

_ ¿Qué estoy haciendo mal ahora?, me dices que te toque, y te acaricio, y ahora me dices que pare. No quiero hacerlo estoy sintiendo tanto como tú. 

Mordió la carne de sus pechos, succionó y lamio sus pezones, los mantuvo entre sus dientes con sumo cuidado. Hasta que llegó al límite de sus fuerzas. Donde estaba no había vuelta atrás, no había medidas ni controles ni tan siquiera intenciones de parar. 

Como una bestia salvaje ahogó su grito en el cuello de Bella donde junto a besos palabras poco entendibles, pronunciadas sin orden alguno, salidas como sonidos, fueron lanzadas hasta la llegada del éxtasis. 

_ Debería estar enfadado por ésto. No me había pasado nada así desde los 15 años. 

_ Y por supuesto yo soy la culpable. 

_ Sin lugar a dudas. Te he dicho que me tocaras, no que me acariciaras como si fueras una bruja maestra, experta y muy astuta. 

_ ¿Todo eso soy?.No me podía imaginar poseedora de tantos títulos. 

_Además de manipuladora y dueña absoluta de mi persona. Pero te aseguro que te costará muy caro. 

_ Bien intentaré pagarte con mi cuerpo. Avisame cuando lo creas necesario. 

_ No tendrás tiempo nena, será ahora mismo. 

Abrió la cremallera de sus pantalones, tan ajustados, que disfrutó haciendolo, mientras que Bella solo podía mirar a sus ojos endiablados, salvajes, los que le decían todos y cada uno de los juegos a los que la sometería. Sintió la mano de Edward abierta, como una alfombra recorrer despacio y ejerciendo la justa presión desde su ombligo bajando por su vientre, hasta introducirse en el interior de sus bragas, para continuar abierta recorriendo su monte de venus, deteniendose en él, estrechandolo, continuar con sus dedos rozando los labios de su coño para luego sin tan siquiera dudarlo, introducir un dedo y luego dos en su coño, el mismo que ella estrechó nada más sentirlos en su interior, hundidos hasta su fondo, proporcionandole tanto placer, que tuvo que cerrar los ojos y abandonar su cuerpo contra la pared. 

_ Eso es, ahora me toca a mí y te aseguro nena que no pienso ser nada rápido. Tenemos toda la noche para nosotros y demasiadas cosas por sentir. 

Bella sintió temblar sus piernas. Mientras le hablaba no había dejado de mover sus dedos dentro de su coño caliente, que con cada una de sus caricias, había ido formando una espiral intensa en todo su cuerpo. Pero no era suficiente, todos y cada uno de sus órganos rogaba, lloraba por más. Era el juego de lo insaciable, de necesitar, de querer y exigir, y la voluntad de jugar con las mismas reglas. Sentir sin pedir, sin implorar, ¿dónde residía más placer?, ¿en la conformidad de lo que te dan?, ¿en la impaciencia de pedir?. Se perdió en sus pensamientos cuando un dedo más de Edward se introdujo dentro de ella, perdido en su humedad en esos momentos avergonzandose casi de sí misma. Un gemido corto, seguido de un gesto de sus dientes mordiendo sus labios, la delataron de un placer desquiciante, loco, que la hacia convulsionar sin contención. 

_ Me vuelves loco nena, casi puedo oler como llega tu orgásmo y eso hace de mí un esclavo a tus órdenes. 

_ ¡¡¡¡Edward!!! 

_ ¿Qué?, ¿qué pare?, ¿qué siga?, ¿qué mueva mis dedos más rápido?, ¿más dentro nena?. No importa que no digas nada, porque sé lo que necesitas ahora mismo, a cada segundo. Tú no hablas, pero tu cuerpo me lo pide a gritos y tu olor me dice que si sigo un poco más, estallarás en mil pedazos. ¿Tú quires eso cariño?, yo no, no ahora, no todavía. Hoy voy a recordarte muchas cosas solo sintiendote y haciendo que me sientas. 

Sus dedos ahora rápidos, se deslizaban entrando y saliendo de su coño con tal maestría que Bella no podía contener sus sonidos, acompañados de una respiración desacompasada que chocaba contra la cara de Edward dandole fuerzas para más. Sacó sus dedos y sintió como Bella se revolvía furiosa y decepcionada. Acarició nuevamente con su mano abierta totalmentte su entrepierna y lo siguiente que oyó fue casi un aullído fiero de queja. 

_ Shsss,Shsss. Te juro que no hay nada más hermoso para mis oídos que tus deliciosos ruíditos, pero guardarlos para más tarde, cuando el juego sea de los dos. Ahora voy a dedicar algo de tiempo a un sensual depilado aquí, (apretó nuevamente su entrepierna y sintió los dientes de Bella morder su cuello). 

_ No sabes como me pones cuando me muerdes o me lames,o cuando besas mi boca como si comieras de ella. Vamos nena, no quiero gatitas, me gustan las lobas. 

Bella apretó aún más sus dientes, lamiendo enseguida con su lengua, intensificando las lamidas y recorriendo la superficie de su carne hasta llegar a su oido. 

_ Eres una encantadora de serpientes, una bruja capaz de envolverme, pero esta vez no, aquí y ahora decido yo. 

Se apartó de ella tirando de sus pantalones hasta el suelo para elevar su visión y mirar esa perspectiva de Bella que lo embriagaba. Su lengua recorrió desde sus tobillos hasta sus muslos. Volvió a meter los dedos en su coño, donde éstos se deslizaban ya sin reservas. Acercó su boca y mordió su pubis mientras la magia seguía haciendo de las suyas en su interior. 

_ Siempre tengo fiegre, tú me haces tenerla, mantienes mi cuerpo tan caliente, ardiendo, que no veo más que a través de tus ojos, de tu placer, y cuanto más al límite te tengo, más perdido estoy. Podría follarte un millón de veces y seguir con ganas de tí. 

La sintió ahora sí, temblar como una hoja.En Bella todo llegaba de aquella manera, a lo grande, y él era el hombre más afortunado del mundo por hacerla sentir de aquella manera. Sonrió , sabía exactamente en ese momento lo que tenía que hacer para hacerla estallar, para que en su mente solo aparecieran luces de colores, explosiones descontroladas, ardor en su corazón y que sus piernas se derrumbaran contra él. ¿Quién era capaz de soportar tanta belleza?. Solo con hablarle un poco más, sus dedos harían el resto. 

Y así lo hizo.Siguió moviendo sus dedos para subir su cuerpo y acercar su boca hacia la de Bella hablando contra ella, tragandose su aliento, rozandola. 

_ Te aseguro que la noche promete, ¿me sientes nena?, estoy duro otra vez para tí. Voy a follarte con mi lengua y con mi boca,voy a hundirme en tí hasta que los dos tengamos que decir ¡basta!,voy a esforzarme por darte una lección de amor que no olvidaremos jamás. Eres mía, eres mi esposa y te quiero entera, la de antes, la de ahora, la que está por llegar, en esta vida o en la próxima no voy a dejarte escapar. 

Fue justo al morder su boca cuando Bella estalló en un gemido hondo que era la música 

que precedía a su explosión. Y como Edward le había dicho, exactamente como sus palabras le habían descrito que sería sucedió. Miles de colores emergiendo de la nada, para llegar a encender cada célula de su cuerpo y entre medio de aquella berberna de sensaciones, sintió a Ewdard agarrarla de sus caderas y arrancar de su coño cada gota de sus fluídos. Agarrada a su cabeza, enrollando sus dedos a su pelo para no caer, los sentidos cada vez mas alerta, dejando en la frontera del final, del comienzo una y otra vez. 

_ ¡¡¡ Edward!!!, no puedo más, no puedo más, para para cariño para. 

_ Esto no es nada nena. Esta noche conseguiré que me ames y me odies (subía su lengua lenta por su cuerpo), que te rías como una loca, y que llores de placer, (llegó hasta su garganta). Voy a comerme tu aire y a escuchar como me pides que siga y luego que pare. Voy a arrancarte cada una de tus caricias, hasta que se vuelvan tan urgentes que quieras pegarme. 

Se detuvo frente a ella mirandola con tal deseo que pensó que no sería capaz de controlarse.Apoyó su frente en la suya, demasiado control estaba sosteniendo y sin embargo estaba desquiciado. 

_Dime que tú quieres lo mismo. 

Y Bella lo dijo todo en esa frase que era una promesa de los dos. 

_ Edward, “Ahora y siempre, todo, en cualquier lugar” 

_Ayudame a contenerme nena porque podría hacerte daño y eso me mataría. 

_ Tú no me harías daño jamás. Tú solo sabes amarme, y adoro como lo haces. ¡Bésame! 










Nota:. Mi dedicatoria final hoy es diferente. Me he subido al carro de las valientes, sin saber si podré salir sin muchas heridas de guerra. He compuesto dos poemas nacidos desde la ilusión, el dolor, la fuerza y la convicción de qué no hay nada que se desee con mucha fuerza que no se pueda conseguir. El primero de ellos se titula “Olas negras”, y quisiera dedicarselo a Loly, Flor, Anes y Mamen, la razón es evidente, somos las viejas chicas. El segundo poema se títula “Deseo” y éste si es para quien quiera leerlo, para vosotras, para todas y cada una a las que he dedicado algún capítulo y las que quedan por tener su pequeña dedicatoria, para quien haya sentido el amor, para quien necesite sentirlo, para quien lo haya perdido, o para quien lo sueñe. Para todas.No puedo ofreceros nada más que no sean mis palabras.

“ Olas negras”

Noche negra negro invierno
día infame, día eterno.

Desde las claras del alba
a esas horas de infierno
donde los perros aullan
y se escuchan desde  lejos,
de pié contra la ventana
soportando su dolor en silencio.
Los pies clavados al suelo
el pecho en un suspiro
la garganta sin aliento
recordando con lágrimas densas
el pasado desde dentro.

Noche negra,negro invierno
día infame, día eterno.

Hace más de un año y medio
 como si fuera hoy lo recuerda
le arrancaron a su hijo
del corazón sin remedio
desde ese lugar donde el mar
no devuelve nunca a los muertos.
La mar no perdona la vida
la mar no devuelve los sueños.

Noche negra, negro invierno
día infame, día eterno.
      Anitina.


“Deseo”
Y al mar pongo por testigo
con su amanecer de rojo intenso
que arrancas con tus caricias
temblores que me dan miedo.

Y te abrazas a mi espalda
como te gusta a tí hacerlo,
y susurras en mi oído
palabras de hermosos sueños
y las huellas de tus dedos
se convierten en pinceles
que dibujan con esmero
cada línea de mi cuerpo.
Y tiemblo, madre mía como tiemblo.

Y tus manos se deslizan
por mi vientre aún muy tenso
que resguardan a nuestro hijo
y lo mantienen  dormido en silencio.
Y me vuelves la cara
y tus labios en un gesto
articulan un “te quiero”
que me como de tu boca
donde encuentro mi alimento.
Y tiemblo,madre mía como tiemblo


Y a la luz del alba despierto,
con tu olor por todas partes
con una sonrisa en mi rostro
y señales en mis pechos
de los bocaos que mediste
cuando llegó sin remedio
lo que andabamos buscando
desde el principio de los tiempos.
Y tiemblo, madre mía como tiemblo.

Y al mar pongo por testigo
con su amanecer de rojo intenso,
que arrancas con tus caricias
temblores que me dan miedo.

anitina.
.


7 comentarios:

  1. Ani, acabo de leer tus poemas,y te juro que cada dia estoy mas concencida que deberias hacer una recopilacion de todo lo que tengas y hacer un libro ,tienes mucho dentro de ti ,no hay mas que leerte para darse cuenta,preciosos poemas ,eres un diamante en bruto ani ,que tiene mucho que ofrecer pero brillas por ti misma cada vez que escribes un renglon ,gracias por todo lo que escribes, tienes tu club de fans particular que lo sepas ,entrar en este chat fue lo mejor que hice y darme cuenta de que hay gente estupenda repartida por todos sitios,me alegro de haberos conocido y espero seguir con vosotras mucho tiempo,besos ani y que pases unas fiestas prciosas con tu riquete jajjajja,y con tus hijos besos para todos,sigue escribiendo que todas te lo agrdecemos de corazon FELICES FIESTAS

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  2. wow!! madre mia ani!! increible como siempre!!!! pero hoy...ufff casi me da algoooo! me encanta este edward tan pasional y dispuesto a volver a enseñar a bella!! y esta bella tan juguetona y dispuesta a desafiar a edward me encantaaaaaaa! muchas gracias por el capituloooo! y los poemas son increiblemente bonitos. eres increibleeeeee! escribes genial!! cada dia me lo demuestras mas!!
    Felices Fiestas y Feliz Navidad!! que te lo pases muy bien con todos los tuyos y que disfrutes un monton!! un besitoooooo

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  3. tremendo regalo de navidad que hermoso capitúlo, waoo casi me de algo es tan pasional y Bella tan tan atrevida, uuuyyyy me encanta y el poema que maravilloso, te Felicito Ani.
    Felices Fiestas.
    Desde Panamá.

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  4. ani q hermoso me encanta todo todo lo q escribes es lindoi amo como escribes cada cosa como la describes ani eres aunica siempre t lo e dicho soy tu fan n.1 gracias x compartir tus escritos con noostras ani eres muy linda persona tqm besos bye (cary)

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  5. ani, hermoso capitulo, que leccion y ella a vuelto, al menos para el ha vuelto, y la arpia mayor se esta dando cuenta que esta perdiendo algo importante bueno inconcientemente, que manera de amarse y de entregarse, ahora y siempre todo en cualquier lugar, amo esa frase, espero el siguiente capitulo para ver como concluye la noche que sin duda sera larga, larga, ahora los poemas, que poemas ani me encantaron los dos, besos guapa, FELIZ NAVIDAD!!! atrasada y espero que tus deseos se hagan realidas, que cumplas tus objetivos y que disfrutes de la felicidad, paz, salud, dinero y amor que espero lleguen a tu hogar en abundancia, y ahora si adelantado FELIZ AÑO NUEVO!!!! tq.

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  6. Coño aní... que tu poema es hermoso... escribes maravilloso enserio que si :3' apenas empeze a leer tu fic... pero me llamo la atención el poema & lo ame :D eres maravillosa (: & bueno aquí sigo XD soy una de las tantas "anons" que salen en el chat... pero da pena jaja como sea

    suerte cariño besos {LayRobsten4}

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  7. OMG me as dejado sin palabras tus poemas son hermosos....Bueno hermosa espero tambien pases unas felices fiestas....Besos ....

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